La Real Academia Española (RAE) desaconseja el uso excesivo de mayúsculas en mensajes de texto, chats y correos electrónicos, ya que pueden dificultar la lectura y ser interpretadas como enojo o urgencia.
Según la institución, las mayúsculas deben usarse únicamente al inicio de oraciones, en nombres propios, siglas y títulos. En contextos informales como chats, se permiten algunas flexibilidades ortográficas, pero no deben extenderse a comunicaciones más formales. Además, la RAE recomienda el uso adecuado del punto, las abreviaturas y los emojis, especialmente en redes sociales y mensajería instantánea, para mantener una comunicación clara y efectiva.